Médico de 50 años que con frecuencia acumula retraso de 2 horas en la consulta, creando algún conflicto, aunque es el que tiene menor cupo de pacientes. Empieza su jornada laboral antes de la hora para planificar y adelantar su trabajo, pero siempre es el último en salir. Explica: «no soporto dejar algo a medias, soy muy perfeccionista, tengo muchas cosas que hacer además de las visitas (burocracia, papeleos) y no tengo tiempo para nada más. No sé cómo lo hacen mis compañeros que tienen familia, aficiones… Yo no tengo tiempo ni para ir al gimnasio. Los fines de semana me quedo en casa, descansando. No tengo vida social.» A la exploración se aprecia una preocupación por los detalles, el orden y las normas, una incapacidad para discernir lo que es urgente y prioritario de lo que no lo es, una conducta inflexible y una incapacidad para delegar. ¿Cuál de las siguientes sería la orientación diagnóstica?:
- Trastorno esquizoide de la personalidad.
- Trastorno narcisista de la personalidad.
- Trastorno obsesivo-compulsivo de personalidad.
- Trastorno de la personalidad no especificado. «
Desde la junta directiva del icomBA queremos expresar nuestra más enérgica repulsa ante la pregunta número 84 de examen MIR, celebrado el pasado 20 de enero de 2024, que se ponía como ejemplo para discernir entre distintas respuestas de patologías psiquiátricas en la asistencia sanitaria prestada por un médico que se esmera en su trabajo y atiende toda la demanda que le llega.
Debemos decir que ante la problemática laboral crónica que sufre la Atención Primaria, teniendo agendas interminables, cupo acumulado de compañeros ausentes, demandas de burocracia difíciles de asumir, sin contar las frecuentes interrupciones para acudir a un domicilio urgente y otras interrupciones habituales, convierte en imposible el asumir dicha carga sin conllevar retrasos, que en ocasiones pueden superar el tiempo de la jornada laboral, sin que ello suponga en la mayoría de los casos ninguna enfermedad psiquiátrica.
Entendemos que dicha pregunta agudiza en el desprestigio y la estigmatización de la medicina de familia y desincentiva el interés hacia esta especialidad en la futura elección de plazas, con plazas finales vacantes, situación que viene padeciendo Extremadura en las últimas convocatorias MIR. Es un mal ejemplo, inadecuado e incluso insultante a una atención primaria que se esfuerza y a la que no se motiva para su opción en la dura prueba selectiva MIR.
El planteamiento de esta pregunta señala una realidad que a los Colegios de Médicos nos preocupa prevenir y abordar, como es el médico enfermo, para lo que trabajamos desde hace muchos años con el Programa PAIME.
No menos nos preocupa a los Colegios de Médicos la grave situación de burn-out que viven los médicos de familia de Atención Primaria en las últimas décadas, fruto de múltiples factores que no dependen de los propios médicos, sino por el contrario, los convierte en víctimas de un “sistema trastornado”.
La pregunta ignora esta dura realidad, lo que denota una falta importante de sensibilidad con el ejercicio de la profesión médica en el sistema sanitario.
Esas situaciones de conflicto que refiere dicha pregunta MIR conlleva, en ocasiones, a que el médico sufra una inaceptable situación de agresión por algunos pacientes, agresiones contra las que seguiremos luchando desde el icomBA, en defensa de nuestros médicos colegiados.
En conclusión, más que una pregunta impugnable debemos calificarla como reprobable.
Por todo ello exigimos su retirada y la petición pública de excusas al responsable (Comité de Expertos del Ministerio de Sanidad) de haber incluido dicha pregunta en el formulario de examen.
Badajoz, a 24 de enero de 2024.